"Sométanse por causa del Señor a toda autoridad humana, ya sea al rey como suprema autoridad, o a los gobernadores que él envía para castigar a los que hacen el mal y reconocer a los que hacen el bien. Porque ésta es la voluntad de Dios: que, practicando el bien, hagan callar la ignorancia de los insensatos. Eso es actuar como personas libres que no se valen de su libertad para disimular la maldad, sino que viven como siervos de Dios." (1 de Pedro 2:13-16 NIV)
"Criados, sométanse con todo respeto a sus amos, no sólo a los buenos y comprensivos sino también a los insoportables. Porque es digno de elogio que, por sentido de responsabilidad delante de Dios, se soporten penalidades, aun sufriendo injustamente. Pero ¿cómo pueden ustedes atribuirse mérito alguno si soportan que los maltraten por hacer el mal? En cambio, si sufren por hacer el bien, eso merece elogio delante de Dios. Para esto fueron llamados, porque Cristo sufrió por ustedes, dándoles ejemplo para que sigan sus pasos." (1 de Pedro 2:18-21 NIV)
1 comentario:
Gracias por la oportunidad de poder participar.
Debemos recordar que el verdadero cristianismo es una contra cultura. En estos días, donde los derechos y libertades nos hacen pensar que tenemos derecho incluso a ir contra la misma ley, pues somos hijos del rey. Pedro nos recuerda la posición que como creyentes y discípulos de Jesús debemos mostrar en la sociedad. El cristiano debe tener en cuenta que el someterse a las leyes no riñe con nuestra fe y muy por el contrario muestra un carácter diferente al de los demás. Pero hasta donde debemos tener esta actitud, creo que hasta el punto que no vaya contra los designios de nuestro creador. Pedro mismo se había enfrentado a los doctores de la ley que le perseguían (cf. Hechos 5:29 ss) y a pesar que ellos eran la autoridad, estimó en ese momento obedecer a Dios antes que a los hombres. El contexto en el que Pedro escribe su primera epístola es mas de una persecución social que política algo como lo que vivimos ahora y por eso exhorta a vivir de manera diferente. Buen reto el que nos lanza Pedro, como afrontar la realidad de nuestra fe con la realidad del mundo en el que vivimos, debemos estar dispuestos a pagar el precio.
Bendiciones.
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